La terapia de ansiedad no siempre es necesaria. Esto se debe a que experimentar ansiedad es normal: es una de las muchas emociones con las que estamos equipados desde que nacemos.

En pequeñas dosis y en la situación adecuada, la ansiedad puede sernos muy útil. Por ejemplo, estar ansiosos por una próxima presentación nos motivará (con suerte) a prepararnos para ella y hacerlo bien.

Sin embargo, algunas personas experimentan niveles elevados de ansiedad que pueden ser debilitantes y pueden tener un impacto significativo en sus vidas.

Experimentar altos niveles de ansiedad es un problema común que puede desarrollarse en la infancia o la edad adulta.

La terapia para la ansiedad puede implicar ayudarle a explorar los pros y los contras de preocuparse en la medida en que lo hace. Es posible que le ayuden a desafiar sus pensamientos y tal vez a intentar no comprometerse con ellos, sino dejarlos ir. Un aspecto importante de la terapia consiste a menudo en ayudarlo a aceptar que no puede tener plena certeza y control sobre sus pensamientos y preocupaciones y dejar de esforzarse por lograrlo. Se explorarán los comportamientos en los que participa que son el resultado de sus preocupaciones y algunos de ellos serán un objetivo para el cambio.

Es posible que sepa que están alimentando su ansiedad y puede ser útil hacer ajustes en ellos. Por ejemplo, puede ser fructífero poner a prueba nuestras preocupaciones y enfrentar nuestros miedos. Esto puede parecer abrumador, sin embargo, con el apoyo de su consejero o terapeuta de ansiedad, puede identificar qué ajustes serían útiles para hacer y ponerlos en juego de manera gradual. La terapia se adaptará a sus necesidades específicas por un terapeuta de ansiedad altamente capacitado.

La terapia de aceptación y compromiso (ACT) es un nuevo desarrollo revolucionario en la psicología humana. Desarrollado originalmente para tratar la ansiedad y la depresión, los principios de ACT se pueden aplicar a una amplia gama de preocupaciones humanas, incluida la terapia matrimonial y de pareja.

Desarrollado originalmente en los EE. UU., ACT se está adoptando rápidamente en todo el mundo. ACT está respaldado por una extensa investigación en curso que confirma su eficacia como enfoque terapéutico.

Aunque se basa en los principios de la psicología del comportamiento, ACT tiene similitudes sorprendentes con muchas tradiciones orientales antiguas, en particular con una base de Mindfulness. A este respecto, el enfoque puede describirse como radicalmente nuevo y basado en algunos enfoques antiguos.

La dependencia emocional es un tipo de dependencia interpersonal genuina por la
que el individuo trata de cubrir una serie de necesidades emocionales insatisfechas
mediante la relación de pareja.

Se propone abordar las diferentes dificultades del cliente mediante el entrenamiento en distintas habilidades
con el fin de dotarle de herramientas que faciliten la exposición a los estímulos
condicionados que disparan las conductas de dependencia.